martes, 2 de octubre de 2007

pauta para aseoria en plan familiar

siguiendo con el tema...

gracias por sus comentarios y espero me puedan ayudar a la corrección, ampliación y difusión

saludos

mario

Orientación a la población civil

Para atender a las inquietudes de la población civil, se debe de tener una visión de gente no experta en materia de protección civil, ya que desafortunadamente, la mayoría de las personas, no tiene ninguna capacitación en este tema. No debemos perder de vista, el hecho de que el nivel educativo y cultural de nuestras comunidades es muy diverso y necesitamos poder proporcionar asesoría independientemente de estas diferencias.

Plan Familiar
Para la elaboración de un plan familiar de emergencia, se deben de considerar los siguientes temas.

Identificar el entorno.
En este paso, se debe de orientar a la gente para definir cual será el alcance de su plan de emergencia, indicando el hecho que una emergencia puede presentarse estando la familia reunida o con cada integrante de la misma en lugares distintos realizando sus actividades (escuela, trabajo, diversión, etc.)
También se debe sensibilizar en el hecho de que prácticamente en todos lo lugares estamos expuestos a amenazas diferentes, pero que hay una serie de medidas comunes para enfrentar estas, y que es muy importante empezar a trabajar en esto a la brevedad.
Se debe de tener cuidado de que esta sensibilización no provoque una sensación de acoso o fatalismo, debiendo mas bien motivar a la gente a tomar acciones de prevención y autoprotección.

Riesgos internos.
La inspección de los lugares en los que vivimos, trabajamos, estudiamos, etc. Nos permitirá identificar situaciones de riesgo por malas construcciones, falta de mantenimiento o proximidad, las cuales al momento de presentarse alguna emergencia, pueden agravar o mejorar la situación.
En estas inspecciones, si bien no se espera que la población en general sea experta en la materia, se deberá revisar la condición estructural, el estado de las instalaciones de servicios, muebles o equipos obstruyendo pasillos o no fijados adecuadamente, instalaciones eléctricas en mal estado o sobrecargadas, tuberías de gas defectuosas, fugas de agua, etc.
Como resultado de esta evaluación se deberá generar una lista de riesgos identificados, para su posterior análisis, y en la medida de lo posible, la corrección inmediata de los mismos.

Riegos externos.
La ubicación de las casas, centros de trabajo, estudio etc. Implica una serie de amenazas externas que debemos de considerar en nuestros planes de emergencia.
En el trabajo previo realizado por la delegación, debemos de identificar las principales amenazas de nuestras comunidades, y complementarlas con la información que la misma gente tenga de su entorno inmediato.
En el análisis de las amenazas, debemos de considerar tanto las naturales, como las creadas por el hombre, y dimensionar el impacto probable de las mismas (por ejemplo, si estamos cerca de un volcán, determinar si estamos en la zona de riesgo o solamente afectados por las cenizas).
Hay que fomentar en esta etapa, la participación de toda la familia, sobre todo de aquellos con mayor tiempo de conocer la región, ya que es frecuente que ellos puedan proporcionar información histórica, de importancia para la identificación de amenazas recurrentes.
El resultado de esta etapa, será una lista de amenazas a las que estamos expuestos, con una estimación de los probables efectos de las mismas y una probabilidad de ocurrencia. También se espera que la información proporcionada por la gente, complemente y detalle nuestro atlas de riesgo.

Recursos disponibles.
La orientación en este punto debe de ser para que la población identifique que recursos tanto internos como externos pueden ser utilizados para enfrentar una eventual emergencia.
Los recursos pueden ser materiales, humanos, de capacitación (por ejemplo, botiquines, herramienta, alguien que sepa primero auxilios, etc.); de la misma manera, se deben de distinguir entre recursos propios y recursos de la comunidad.
Se debe sensibilizar el hecho de que ante una emergencia mayor, los recursos de la comunidad, pueden no estar disponibles de manera inmediata o sin acceso a la zona afectada.
Resultado de esta etapa, debe de ser un inventario de recursos indicando disponibilidad y en caso de ser alguna instancia externa, un directorio telefónico.

Identificación de zonas de seguridad.
Dentro de las instalaciones que habitualmente utilizamos (casa, escuela, centro de trabajo) debemos de identificar zonas seguras para cada tipo de amenaza previamente identificada.
Estas zonas deberán de considerar el interior y el exterior de las instalaciones, así como los criterios para la utilización de las mismas (por ejemplo en caso de inundación, subir al centro comunal en el cerro).
El resultado esperado, es una lista de las zonas de seguridad para cada evento.

Rutas de evacuación.
Una vez identificadas las áreas de seguridad, se debe de definir como llegar a las mismas y los criterios para su utilización.
En todo caso, se debe de definir una ruta alterna a utilizar en caso de que la principal este inaccesible.
Esta etapa debe de concluir con la elaboración de los croquis donde se indique la ruta a seguir. Es importante recordar que para cada tipo de evento puede ser necesario utilizar rutas diferentes.

Sistemas de alertamiento.
Para varios tipos de amenaza, las autoridades han desarrollado sistemas de alertamiento (semáforos de alerta volcánica, SIAT-Huracanes, Alerta Sísmica, etc.) y como parte de la preparación, debemos de conocer el funcionamiento y significado de cada uno de los niveles de la misma.
De la misma manera, los medios de comunicación desempeñan un papel importante en la difusión de estas alertas, y cada vez mas, las autoridades establecen programas conjuntos con los medios locales, así que debemos de reconocer la forma en que recibiremos estas alertas.
Esto nos lleva también a considerar como parte de nuestro plan, la adquisición de un radio portátil para poder recibir los mensajes que nos vayan dando sobre cualquier posible evento.
También debemos de poder definir las fuentes oficiales de información, ya que en caso de emergencia, es muy fácil que nos dejemos llevar por los rumores y dejar de atender las indicaciones oficiales.

Integración comunal.
En algún momento dentro del proceso de preparación, debemos de considerar que están haciendo nuestros vecinos y nuestras autoridades, por lo que una vez que hayamos preparado nuestro plan familiar, debemos de compartirlo con nuestros vecinos y complementarlo con los planes que las autoridades de protección civil tenga definidos.
En la medida de los posible, organizar con los vecinos la posible respuesta a una emergencia y adecuar los recursos especializados (equipos especiales, gente entrenada, lugares comunitarios considerados como zona de seguridad, etc.) para poder ser utilizados en caso de emergencia.
Aquí es recomendable tomar en cuenta que ante una emergencia, la primera respuesta es la que la comunidad pueda brindar, y que la respuesta especializada, llegará conforme la situación lo permita, de ahí la importancia de tener una organización comunal que pueda responder adecuadamente.

Puntos de contacto.
Ante la presencia de una situación de emergencia, es altamente probable que los miembros de la familia se encuentren en lugares diferentes, debido principalmente a la realización de sus actividades regulares. La misma emergencia puede impedir que se reúnan rápidamente en un mismo lugar, por lo que es importante definir lugares alternos de reunión, así como nombrar familiares dentro y fuera de la ciudad con los cuales se deberá establecer comunicación a la brevedad posible, a fin de informarles el estado en el que nos encontramos y tranquilizar al resto de la familia.
Es muy importante avisar previamente a los contactos que ellos son, y que en caso de una emergencia, su función será tratar de establecer contacto con todos los integrantes de la familia.
Una lista con los lugares y puntos de contacto deberá de ser generada como resultado de esta etapa.

lunes, 1 de octubre de 2007

Introduccion a la Preparación Comunitaria

Introducción

La preparación comunitaria debes de ser la base de cualquier programa de desastres, tomando en cuenta que la comunidad es el primer afectado por algún evento, y que son la primera respuesta al mismo. En la medida que la capacidad de respuesta de la comunidad se vea fortalecida, la afectación será menor, de ahí la importancia de trabajar fuertemente con la comunidad.

El presente documento pretende ser una guía para que podamos orientar a la población en su preparación, siendo necesario que esta guía se transforme en una serie de documentos adecuados a las condiciones de las delegaciones y comunidades en las que se este utilizando.

Trabajo previo

Para poder apoyar a las comunidades, es necesario realizar un diagnostico de entorno a fin de conocer las amenazas, el riesgo y las capacidades para enfrentarlas.

El primer paso, debe ser la designación de un responsable del programa e integrar el equipo que le apoyara de manera directa, sin perder de vista que para el buen funcionamiento de un programa de este tipo, se requiere la participación de toda la delegación.

Una vez integrado el equipo, el trabajo del mismo, estará orientado a los siguientes temas:
  • Evaluación de amenazas y riesgos.
  • Recursos disponibles.
  • Necesidades.
  • Comunicación.
Evaluación de amenazas y riesgos.

Para poder apoyar a adecuadamente a las comunidades, es necesario conocer las amenazas a las que estamos expuestos.
Para hacer esta evaluación, se pueden seguir diversas metodologías, pero en cualquiera utilizada hay que tener en cuenta los antecedentes históricos, y la experiencia de las comunidades.
La información recopilada de las amenazas, deberá de ser referenciada geográficamente, de manera que cuando alguna comunidad o persona solicite información, podamos orientarlo sobre las amenazas específicas de su entorno.
Esta evaluación, será también útil para los trabajos de planeación que se deben de realizar de manera interna.
No hay que perder de vista, que esta información generalmente ya se encuentra recopilada por las autoridades de Protección Civil, o Investigaciones universitarias, por lo que es importante establecer y mantener un vínculo con estas instancias para enriquecer de manera conjunta esta información.